domingo, 28 de septiembre de 2014

Era mi primer día en medicina interna, en el hospital San Francisco de Borja, tal y como expliqué en la anterior entrada, estaba nervioso y por primera vez, me adentraba en un mundo en el que prácticamente debía valerme por mí mismo. Lo primero que hice, fue conocer a mi entorno (un buen enfermero, es tan bueno como lo es su equipo).

El verano terminaba y los últimos días de calor se despedían, para dar lugar a un período en el que era imposible aburrirse: hablo en efecto, de mis primeras prácticas. Finalmente, tras semanas de espera, se publicaron los centros que estaban dispuestos a acoger a los primerizos, en el extenso campo de la enfermería. A mí me tocó en en hospital de Gandía, San Francisco de Borja. En concreto, el servicio de Medicina interna, aunque ya entraremos en más detalles el próximo día. ¡Nos vemos el próximo día!
Pasaron los años y por fin ingresé en un centro para cursar mis estudios de enfermería, en este caso: la U.C.V. de Alzira.

Cómodamente, y con el respaldo de tal institución, empecé a realizar mis primeras prácticas de enfermería en el segundo curso, no había sido fácil hasta ahora, pero a partir de ahí, el asunto cobró otro color...

jueves, 25 de septiembre de 2014

Y ahora, voy a contaros mi vida...

No era nada más que un chaval, pero era cuando descubrí que el tiempo efectivamente, no pasaba en balde. Había terminado los estudios previos a la entrada a universidad, y debía elegir una carrera, pero, ¡estaba indeciso!, pobre de mi.

En mi caso, por vocación, me fijé en la rama sanitaria, pero dentro de ella, ¿qué elegir?, así que me puse a buscar:
http://aceue.blogspot.com/
http://educacionparalasaludtenerife.blogspot.com/
http://enfeps.blogspot.com/
http://elrincondeberni.blogspot.com/

Aquí descubrí, acerca de la profesión de mi vida...

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Buenos días, tardes, madrugada... la verdad es que el mundo del enfermero nunca descansa y siempre está en continuo cambio. Hoy estamos aquí para decir cómo surge la chispa, a partir de la que emprendes tu camino como enfermera o enfermero.

Hace ya tres años que he empezado mi aventura como enfermero, es un camino difícil y abrupto, pero sin embargo, lleno de emocionantes recompensas. Esa es la vida de una enfermera o enfermero, siempre llena de altibajos.

Digo lo de hace ya tres años, porque es ahora cuando decido desvelar el camino que he seguido y seguiré, hasta convertirme en un profesional sanitario.